La ermita de Andra Mari está enclavada en las colinas del barrio de Ondiz, bajo la advocación de Nuestra Señora de los Remedios, popularmente Ondizko Andra Mari. Esta ermita es de origen medieval, aunque el edificio actual es del siglo XVI, estando construida en estilo gótico de transición al renacimiento, con reformas posteriores de los siglos XVIII y XIX. Desde ella se divisa un territorio extenso y por eso, durante las guerras carlistas, se le adosó un fortín en la parte sur (algunos restos de éste, como las aspilleras de ladrillo, aún se conservan).
Su planta es rectangular, de 22,90 x 8,20 m con cubierta a dos aguas, con una cubierta más baja sobre el pórtico del lado norte. Los muros son de mampostería vista, pero los esquineros y la espadaña (de un vano, con campana) son de sillería. La entrada original estaba en la cara sur del edificio, donde existe una puerta ojival semioculta por los cuatro contrafuertes que soportan el peso del muro, y otra de arco escarzano (actualmente cegadas), conservando ventanas adinteladas, otra en arco carpanel y dos aspilleras. La actual entrada principal es una puerta de arco de medio punto en el lado norte, donde también tiene una ventana en arco carpanel, una aspillera y una ventana en arco apuntado. En el lado del Evangelio hay un pórtico, que sustituyó a otro antiguo que se localizaba en el lado de la Epístola y que está derrumbado. En 1979 fue restaurada. En su interior el pavimento es de madera y destaca, entre numerosas imágenes, la talla de madera que representa a la Virgen y al Niño que data de la época renacentista.
Adscrita a la parroquia de San Juan Bautista, en Ondiz se celebra una misa dominical y, en ocasiones, también es usada para celebrar bodas. Se celebra la festividad de Andra Mari y Andramaritxu, el 8 y 9 de septiembre, con una misa cantada y romería popular siendo, junto con las de San Juan, unas de las fiestas más famosas y esperadas. En los inicios de esta celebración se salía en procesión con bandera y música desde la iglesia de San Juan, llegando a la ermita de Ondiz donde se celebraba misa solemne. A continuación se organizaban carreras de burros, carreras de sacos y concursos de aurreskularis. Por la tarde había romería. Al domingo siguiente, desde 1865, se celebra misa de repetición y otra romería, habiendo desde inicios del XX un concurso de aurreskus de hombres y mujeres y, por la tarde, de nuevo romería. Se viene celebrando San Isidro Labrador el 15 de mayo desde los años 30 del siglo pasado. Hoy en día, durante las fiestas, se siguen celebrando el concurso de bacalao a la vizcaina y el campeonato de aurresku de Bizkaia para hombres y mujeres.
Fuentes: "Ermitas de Bizkaia I-II-III" de Gurutzi Arregi y "Leioa a través de la historia".
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